CREANDO ESPACIOS:
"Los árboles desde la perspectiva de la poesía"
Por: Ana Silvia Figueroa-Duarte
Nuestro segundo recurso está dedicado a la poesía, consiste en una selección de poemas, del texto titulado: “La poesía de los árboles”; es la segunda Edición de Ignacio Abella, de Nórdica Libros, 2022. Las primeras tres imágenes que los acompañan, fueron tomadas de Internet, de noticias sobre la tala ilegal de árboles tanto del estado como del país; las dos últimas son de paisajes del estado.
Cortaron tres árboles
Eran tres.
(Vino el día con sus hachas.)
Eran dos.
(Alas rastreras de plata.)
Era uno.
Era ninguno.
(Se quedó desnuda el agua.)
-Federico García Lorca
Han descuajado un árbol
Han descuajado un árbol. Esta misma mañana,
el viento aún, el sol, todos los pájaros
lo acariciaban buenamente. Era
dichoso y joven, cándido y erguido,
con una clara vocación de cielo
y con un alto porvenir de estrellas.
Hoy, a la tarde, yace como un niño
desenterrado de su cuna, rotas
las dulces piernas, la cabeza hundida,
desparramado por la tierra y triste,
todo deshecho en hojas,
en llanto verde todavía, en llanto.
Esta noche saldré –cuando ya nadie
pueda mirarlo, cuando ya esté solo-
a cerrarle los ojos y a cantarle
esa misma canción que esta mañana
en su pasar le susurraba el viento.
-Rafael Alberti
Tres árboles
Tres árboles caídos
quedaron a la orilla del sendero.
El leñador los olvidó, y conversan,
apretados de amor, como tres ciegos.
El sol de ocaso pone
su sangre viva en los hendidos leños
¡y se llevan los vientos la fragancia
de su costado abierto!
Uno, torcido, tiende
su brazo inmenso y de follaje trémulo
hacia otro, y sus heridas
como dos ojos son, llenos de ruego.
El leñador los olvidó. La noche
vendrá. Estaré con ellos.
Recibiré en mi corazón sus mansas
resinas. Me serán como de fuego.
¡Y mudos y ceñidos,
nos halle el día en un montón de duelo!
-Gabriela Mistral
Olvido
¿Has olvidado que el bosque es tu hogar?
¿Qué el bosque grande, profundo y sereno
te espera como a un amigo?
Vuelve al bosque.
Allí aprenderás a ser de nuevo un niño.
¿Por qué te olvidaste que el bosque es tu amigo?
Los caminos de las hormigas bajo el cielo,
el estero que te daba palabras luminosas,
el atardecer con el que juegas con la lluvia.
¿Por qué lo has olvidado?
¿Por qué no recuerdas nada?
-Jorge Teillier
Paz
Vamos hacia los árboles… el sueño
se hará en nosotros por virtud celeste.
Vamos hacia los árboles; la noche
nos será blanda, la tristeza leve.
Vamos hacia los árboles, el alma
adormecida de perfume agreste.
Pero calla, no hables, sé piadoso:
no despiertes los pájaros que duermen.
-Alfonsina Storni