“Interdependencia” Marzo 2015
“Interdependencia“ Marzo 2015
Ana Silvia Figueroa-Duarte
En esta pieza se utilizaron los siguientes materiales: lápiz de grafito, tinta y papel de acuarela sobre un soporte con tela de algodón. Fue inspirado en algunos de los zentangles compilados por S. McNeill y cols. (2013), en Joy of zentangle; y en el tema de la relación como fuente de desarrollo humano, desde la perspectiva de K. Gergen (2009), principalmente en su texto: Relational Being. Beyond Self and Community.
La intención del autor en dicho texto, es generar una explicación de la acción humana que pueda remplazar la suposición del ˜yo limitado en el sí mismo˜ a una visión en la relación. Pero no se trata de una relación de personas separadas e independientes; más bien de un proceso de coordinación que precede al mismo concepto del ˜yo˜. El autor reafirma su esperanza en demostrar que prácticamente toda acción inteligible es nacida, sostenida, y/o extinguida dentro de un proceso continuo de relación. Desde este punto de vista no existe un ˜yo˜ aislado o una experiencia completamente privada; más bien existimos en un mundo de co- constitución. Por lo que, estamos siempre emergiendo de relaciones, no podemos pasar fuera de éstas.
De acuerdo con este enfoque, el futuro del bienestar del planeta, depende considerablemente en la extensión en la cual podamos nutrir y proteger no individuos o grupos, sino el proceso generativo de la relación. Una visión de la relación en nuestra vida cotidiana, que invita a diferentes formas de acción para la transformación de nuestras instituciones: salones de clase, organizaciones, laboratorios de investigación, oficinas de terapia, templos, y gabinetes de gobierno. El mensaje es que sostener o mejorar el bienestar general requiere eficacia colaborativa. Así, establecer contactos colaborativos se convierte en una forma de vida, mientras que los valores de ˜autonomía˜ e ˜independencia˜ pasan a la historia.
Su propuesta es trascender la visión de la Ilustración sobre el ser humano. Dado que ver al ˜yo˜ como centro del universo alrededor de quienes los otros giran, no es más equivocado que sostener que la tierra es el centro del universo. Señala que nos movemos hacia una Nueva Ilustración en la cual el valor del ˜yo˜ es remplazado por el beneficio de la relación. Esto significa: Ir del “todos en contra de todos“, por “todos con todos“. Así, sostiene que cuando el bienestar relacional es el centro de nuestra preocupación nos acercamos a un futuro que promete vida.
Retomando las palabras del Dalai Lama (cit por Gergen, p.367): “En las sociedades humanas siempre habrá diferencias en visiones e intereses. Pero la realidad de hoy es que todos somos interdependientes y tenemos que co-existir en este pequeño planeta. Entonces, la única forma sensible e inteligente de resolver diferencias y conflictos de intereses, ya sea de individuos o naciones, es a través del diálogo“. Pero no se trata de cualquier diálogo, en donde uno trata de imponer su verdad sobre los otros, o en la práctica tradicional y común de: disputa, intercambio de críticas y culpa mutuas. En contraposición a dicha práctica, es un diálogo apreciativo el cual llama a cumplir diferentes funciones: nutrir, informar, facilitar,
compadecerse, etc. Nutrir las capacidades para la conexión y el cuidado en un mundo fragmentado y dividido.