1. Taller de expresión creativa para niños y niñas

Nuevamente, como una inquietud personal y de manera voluntaria y gratuita, realizamos durante los meses de junio a julio de 2011 un taller para niños y niñas que viven en colonias marginadas de la ciudad de Hermosillo, Sonora, y por la misma razón no cuentan con otros servicios de atención. Dicha actividad se llevó a cabo (previa aprobación de las autoridades correspondientes, y de la aceptación por parte de los participantes y de sus madres) en el aula magna del Centro Infantil de Desarrollo Neuroconductual (CIDEN) de la Sría. de Salud (Sonora). En total se conformó un grupo de siete niños (tres del sexo masculino y cuatro del femenino), en edades entre los 10 y 12 años, que presentan problemas de conducta, trastorno de la atención, deficiente aprovechamiento escolar, epilepsia, entre otros. Se llevó a cabo en cinco sesiones semanales con una duración de 12 horas en total.

El objetivo de realizar este taller, fue el de generar un espacio creativo que facilitara la libre expresión, tomando como base las artes (pintura, narrativa, artes visuales, etc.); al considerar que dichas actividades son poco atendidas y menos reconocidas en su educación formal. La finalidad fue la de ofrecer a niños y niñas que por su condición económica y de marginación, les es difícil el acceso a participar en una actividad de tipo lúdico-creativa. En donde tuvieran la oportunidad (sin ningún costo económico para ellos ni sus familias) de experimentar con distintos tipos de materiales, temáticas y diversas formas de trabajo, que ampliaran sus experiencias y su imaginación; con el diseño y organización de actividades que tomaran en cuenta sus necesidades de expresión creativa.

En general, las y los niños mostraron gran interés y entusiasmo por las actividades que en cada sesión se desarrollaban, esperando impacientes por ver cuál era la que se había programado para la siguiente sesión. Fue una sorpresa enterarnos de que uno de los niños trabajaba durante la semana para pagar los camiones para asistir al taller, hasta otros que se arreglaban muy contentos ese día que les tocaba ir al centro. O bien, que no les importaba el calor (46ºC) que tenían que pasar en el transporte, para llegar al lugar donde se impartían dichas actividades.

Los resultados que encontramos como conclusión de este taller, se corroboran con lo observado por las madres en sus reportes, donde señalan cambios en la conducta de sus hijos, en la interrelación y comunicación con sus padres y hermanos, de su autoimagen, y de la actitud hacia las tareas escolares (recordemos que son niños que han tenido dificultades en estas áreas). Y en general, una mayor sensibilidad y disposición a las actividades artístico-creativas. De la misma forma, se apreció en las madres más confianza al expresar sus opiniones sobre sus hijos, y una mayor socialización entre ellas al brindarles la oportunidad de convivir como grupo.