Talleres para estudiantes de medicina
Taller para estudiantes de pregrado en medicina
Nuevamente como una actividad extra académica, voluntaria e independiente decidimos realizar un taller sobre literatura y medicina, complementaria al curso de Neurología Clínica, con dos grupos de estudiantes de medicina del séptimo semestre de la Universidad de Sonora. El objetivo del taller fue acercar a los estudiantes al ámbito humanístico de la medicina, así como desarrollar en ellos habilidades críticas y reflexivas en torno a su formación en la práctica clínica.
Con tal fin se emplearon dos estrategias:
b) Reportes de su experiencia clínica.
Un total de 39 estudiantes participaron en dicho taller y correspondieron a los ciclos escolares 2004 y 2005.
Los estudiantes identificaron en los textos literarios, de acuerdo con los temas propuestos, problemas que relacionaron con la realidad cotidiana en la que viven. Lo cual les permitió reflexionar en aspectos tales como: las carencias que se viven actualmente en el sistema médico y de salud, y la manera en que afecta a la práctica clínica. Lo anterior en un contexto donde predomina una cultura materialista y enfocada a la tecnología. Esto se complementó con el examen de su
propia experiencia en la consulta médica, en donde se detectaron necesidades en el desarrollo de habilidades e insuficiencia en su aprendizaje.
Tiempo después advertimos que el material narrativo recabado durante los cursos nos ofrecía una oportunidad inestimable para su análisis y reflexión; y de nuevo, el interés compartido por la investigación en la enseñanza de la medicina nos llevó a realizar un artículo para publicación, el cual ya puede ser consultado en:
Discusión sobre resultados del taller
Entre los aspectos más importantes que emanan de este estudio destaca la identificación de las carencias y necesidades que los mismos estudiantes perciben de su aprendizaje; tales como la falta de práctica clínica, de convivir con las personas (los pacientes), de un aprendizaje limitado a los libros, de instructores que funcionen como modelo y guía. De igual forma, la necesidad de desarrollar habilidades para realizar la entrevista clínica, manejar sus emociones, sistematizar las actividades en la entrevista: organizar la información y realizar la exploración física, enseñar a dar malas noticias, capacitarlos en la atención a niños. Un entrenamiento en donde se establezca un abordaje no sólo a lo orgánico sino también a lo psicosocial.
Lo anterior muestra el gran vacío en cuanto a la enseñanza de la clínica. Lo cual concuerda con los resultados obtenidos en un trabajo realizado por Campbell y Figueroa (2006) [1] con residentes de segundo año de pediatría, con el propósito de conocer sus percepciones y actitudes acerca de los niños con enfermedades y/o discapacidades neurológicas. Igualmente se encontró una brecha en el entrenamiento de la relación médico-paciente.
Así, los resultados obtenidos en este trabajo nos proporcionan suficientes elementos para ser propositivos en cuanto a las brechas que habría que allanar en lo referente al conocimiento de la clínica. Por lo que consideramos impostergable diseñar dentro de la currícula, materias que contemplen dichas necesidades. Para lo cual se requiere invertir mayores recursos en actividades que redunden en una mejor formación tanto de estudiantes, médicos-educadores e investigadores en el ámbito de la enseñanza y aprendizaje; así como en las áreas de asistencia e investigación. Y no sólo “depender” de la buena voluntad y vocación de personas intrínsecamente humanistas.
[1] Campbell-Araujo OA, Figueroa-Duarte AS. Percepción de médicos residentes de segundo año de pediatría, sobre enfermedades crónicas y discapacidades en neuropediatría. Revista Mexicana de Neurociencias 2006; 7 (5): 441.